Reseñar no es tarea fácil. Menos si el libro es de alguien que conoces, aunque sea vía Facebook, y sabes que con toda probabilidad leerá lo que has dicho de su libro. Hace unos días leí "Ebro 1938. La batalla de la Tierra Alta" de Rubén García Cebollero y, una vez concluida la lectura, no podía decir que el libro me había gustado. Se me había hecho arduo de leer. Ante eso tenía dos opciones: mentir y quedar bien o ser sincera y arriesgarme a que al autor no le sentaran bien mis palabras. Opté por lo segundo. Creo que hay que ser honesta en esta vida. A mí me gustaría que lo fueran conmigo.
Y así hice la reseña: con sinceridad pero desde el más absoluto respeto. Por eso hice hicapié en que este libro quedó entre los diez finalistas del Planeta 2004, ahí es nada. Podéis ver la reseña en el blog http://librosalaluzdelaluna.blogspot.com . Hoy, mi sorpresa, ha sido recibir un mail de Rubén en el que me agradecía la reseña. ¡Uf! He respirado tranquila. Espero tener ocasión de poder entrevistarle y hablar con él del tema, de explicarle mi opinión. En cualquier caso me alegra que Rubén me haya mandado ese mensaje y que sea capaz de encajar las críticas con tanta elegancia. Por otro lado, tampoco quiere decir que yo tenga razón, simplemente es la opinión de una lectora desde la más absoluta humildad. Pero que queréis que os diga, es un alivio saber que una crítica no demasiado buena no te va a suponer un mal rollo. Gracias Rubén.
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