Ayer compartí tarde con el escritor Enrique de Hériz, bueno, la compartimos mis compañeros del XII Curso sobre la Creación Literária y la Edición y yo. No puedo evitar, después de cada clase, acordarme de Nuria y de sus palabras al explicarme sus emociones cuando hizo ella este mismo curso en otra de sus ediciones. Ayer fue genial. Casi pierdo el tren de vuelta a casa porque el escritor continuaba hablando con apasionamiento aún cuando ya eran más de las 20:30, hora en que acaba la sesión, y yo no me podía levantar de la silla porque estaba encantada con lo que oía.
Enrique es un escritor de tempos largos. Ha escrito y publicado cuatro novelas. Cada una de ellas le ha llevado entre 5 y 7 años de trabajo. Curiosamente, pese a su experiencia, pese a haber sido también editor, no hablaba como si estuviera sentando cátedra, como si la suya fuera la única fórmula válida, simplemente refería su forma de ver las cosas, su manera de hacer... pero siempre dejando claro que no son únicas y que cada escritor tiene las suyas.
Dijo algunas cosas fantásticas, o que a mí me lo parecieron. Ser escritor es la necesidad de sentarse a escribir, en ocasiones algo físico. El escritor (bueno o malo, publicado o inédito) necesita escribir o se siente mal. Habló de sus largos procesos de documentación que hacen que la escritura de sus novelas se dilate tanto en el tiempo y me hizo pensar en mi novela sobre Egipto y en que la escribiré cuando esté preparada para hacerlo, ni más ni menos.
Cuando llegué a casa Robert me preguntó qué tal había ido la clase y si creía que me puede ser útil lo que estoy aprendiendo en mi faceta de escritora. La respuesta fue rápida y no tuve que pensarlo ni un momento: SÍ. Me será útil no sólo para la voyeuse en la que como escritora me he convertido, una mirona que observa y almacena imágenes que luego convertirá en palabras. Conocer cómo funciona "la cocina" de otros escritores y sus recetas, es genial. Identificarse con ellos, saber que haces algunas cosas similares y compartes puntos de vista. Ya tengo ganas de que vuelva a ser lunes ... bueno, no tanto :D.
4 comentarios:
Me encanta cuando se nota que estás contenta y de buen humor, por disfrutas de lo que estás haciendo.
Nunca se termina de aprender ¿verdad?
Sí que es verdad, me gusta y me hace sentir bien. Una de las mejores cosas de a vida es descubrir, aprender... en esos estamos. Besitos.
¡Qué envidia! Precisamente ahora que ando un poco sumido en el caos con la fase documentativa de mi novela me vendrían muy bien unos consejos al respecto. Me alegra que tu experiencia fuese fructífera. Eso se verá en "la hija del escriba", jejeje. Besos.
Básicamente, Víctor, me quedó claro que cada persona necesita sus tempos. Enrique es un escritor de documentaciones largas e intensas y creo que le da muy buen resultado. Me ayudó a quitarme presión de encima preocupada como estoy por tener otra novela a punto. No sé, siempre es bueno charlar con gente que conoce bien el oficio. Una cosa que dijo: tras el proceso de documentación "todo la información que no se pueda convertir en hecho narrativo no debe usarse" y dejó claro que tampoco hay que hacer "alarde de documentación". Espero que te sirva de algo. Besitos
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