Sant Feliu de Llobregat. Son poco más de las seis de la tarde. Un calor que achicharra y atonta. Y yo, he dejado mi cuartel central en Torredembarra, mi piscinita y mi maravillosa y fresquita corriente de aire para ir a hacer una entrevista a la escritora Maite Carranza.
Maite me viene a recoger a la estación. Charlamos. En el trayecto hasta su estudio me pregunta sobre mí. Para una mindundis como yo resulta muy gratificante que alguien como ella muestre un mínimo de interés en lo que hago. Maite es amable, sencilla, cercana y muy agradable.
Llegamos a nuestro destino un lugar tranquilo y silencioso de esta ciudad. Me invita a beber algo refrescante mientras conversamos. Subimos a su estudio y es allí donde se produce la magia. Maite se transforma apenas le lanzo la primera pregunta. Es entonces cuando aparece la escritora. Hablamos largo y tendido durante un rato. Le formulo las preguntas que llevo preparadas, otras que surgen sobre la marcha y hablamos de lo que nos gusta a ambas: escribir. También me hace algunas confesiones off the record pero eso quedará para mis memorias ja ja ja. He disfrutado muchísimo charlando con Maite. Anika entre Libros me está brindando la oportunidad de leer por un tubo y también me da la excusa perfecta para conocer a otros escritores. La entrevista estará próximamente allí si os apetece saber más sobre esta grandísima escritora.
Me alegro que la entrevista saliera bién, no lo dudé ni un instante...
ResponderEliminarUna vez cumplida la obligación, disfruta de tu maravillosa piscina..jejejeje.
Agur un saludo.