PREPARANDO UNA PROPUESTA EDITORIAL

Reconozco que soy un poco perezosa a la hora de enviar escritos a las editoriales. No es algo que me apetezca nunca. Además suelo encararlo como algo totalmente incierto porque casi nunca depende de una misma. Pero de tanto en tanto hay que hacerlo. De vez en cuando toca. Nunca he hecho eso de enviar una novela a cien sitios diferentes a ver qué ocurre, sólo de pensarlo me angustio. Siempre lo he hecho de una en una, pausadamente, y sólo con "El susurro de los árboles" que a la cuarta se publicó y no por los cauces habituales sino a través de un premio. Esta vez no va a ser diferente. Enviaré un original a un amigo que lo hará llegar a una editorial que conoce personalmente. Ni siquiera sé si mi obra encajará con el perfil de lo que publica esa editorial, pero mi amigo insistió y se ofreció amablemente y no pude decirle que no. Tampoco perdemos nada, ¿no? Pues eso, que vamos a intentarlo. De todas maneras es algo que escribí hace tiempo, que revisé no hace tanto y que he pensado que podría ser rescatado de la niebla del olvido de los archivos word de mi tronado portátil. A ver si cae la breva. Con todo el tema de las vacaciones y tal y tal tardará lo suyo pero en cuanto salte la liebre, si salta, os lo contaré. Palabra de Bruja escritidora.